¿Cómo podemos mejorar la autoestima en los niños? Psicólogos Retiro

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Las creencias que tenemos acerca de nosotros mismos, aquellas cualidades, capacidades, modos de sentir o de pensar que nos atribuimos, conforman nuestra “imagen personal” o “autoimagen”

La “autoestima” es la valoración que hacemos de nosotros mismos sobre la base de las sensaciones y experiencias que hemos ido incorporando a lo largo de la vida. Nos sentimos listos o tontos, capaces o incapaces, nos gustamos o no. Esta autovaloración es muy importante, dado que de ella dependen en gran parte la realización de nuestro potencial personal y nuestros logros en la vida.

A group of cheerful kids with their palms and clothing painted

El concepto de uno mismo va desarrollándose poco a poco a lo largo de la vida, cada etapa aporta en mayor o menor grado, experiencias y sentimientos, que darán como resultado una sensación general de valía e incapacidad. Durante la infancia descubrimos que somos niños o niñas, que tenemos manos, piernas, cabeza y otras partes de nuestro cuerpo. También descubrimos que somos seres distintos de los demás y que hay personas que nos aceptan y personas que nos rechazan. A partir de esas experiencias tempranas de aceptación y rechazo de los demás es cuando comenzamos a generar una idea sobre nosotros mismos.

¿Cómo es posible desarrollar una buena autoestima durante la infancia en nuestros hijos?

Lograr que nuestro hijo tenga un nivel de autoestima saludable es una parte importante que le servirá para enfrentar los desafíos del mundo. Los niños que se sienten bien con ellos mismos parecen tener más facilidad para enfrentar conflictos y resistir las presiones negativas. Sonríen con más frecuencia y disfrutan de la vida, por lo general se sienten bastante seguros con ellos mismos. Estos niños son realistas y, por lo general, optimistas.

Por el contrario, los niños que tienen un bajo nivel de autoestima, les cuesta enfrentarse a los desafíos, lo que suele transformarse en fuentes de ansiedad y frustración. Por lo general, los niños que piensan que sus capacidades no son buenas les cuesta mucho trabajo hallar soluciones para sus problemas. Cuantos más pensamientos autocríticos tengan y cuanto más duden de sus capacidades («No puedo hacer nada bien», «Todo me sale mal», “Soy el peor en todo”) más fomentan emociones negativas. Cada vez que se enfrentan a un nuevo desafío, su respuesta inmediata es «No puedo», “no soy capaz”. Uno de los objetivos de este artículo es tomar conciencia de la importancia de fomentar una buena autoestima desde que nuestros hijos son pequeños, así como también dotar de diferentes pautas y estrategias para hacer esto posible.

Señales de autoestima saludable y no saludable

Un niño que es feliz con sus logros, pero que no se siente querido o apoyado en su entorno puede llegar a experimentar un nivel bajo de autoestima. De igual forma, un niño que se siente querido pero que duda respecto de sus propias capacidades, también puede llegar a experimentar un sentimiento de autoestima baja. El nivel óptimo de autoestima es el resultado de lograr una combinación de ambos aspectos.

La autoestima fluctúa en las diferentes etapas del crecimiento. Se va transformando con frecuencia, ya que es afectada por las experiencias y nuevas percepciones del niño. Los padres deben tratar de estar atentos a las señales de una autoestima saludable y no saludable.

En general, un niño que tiene su autoestima saludable disfruta al interactuar con sus pares y se relaciona adecuadamente dentro de sus iguales. Se le ve actuar cómodo en ambientes sociales y disfruta tanto de las actividades en grupo como de las que realiza de manera independiente. Siempre trata de buscar nuevas actividades. Cuando debe enfrentarse a desafíos, puede trabajar en busca de las soluciones. Expresa su descontento sin menospreciarse a sí mismo ni a los demás. Por ejemplo, en vez de decir, ‘Soy un tonto’, dice ‘No lo entiendo” o “enséñame”. Conoce sus fortalezas y debilidades y las acepta. Prevalece un sentimiento de optimismo.

Es posible que un niño que tiene la autoestima baja sea temeroso ante los nuevos desafíos. A menudo habla negativamente sobre él, y dice cosas como, “Soy un tonto”, “Jamás voy a aprender a hacer esto”, o ‘Todo el mundo es mejor que yo’, “Soy un torpe”. Tiene un bajo nivel de tolerancia a la frustración, se rinde fácilmente o espera que otra persona asuma el control de la situación. Los niños con un bajo nivel de autoestima consideran que los contratiempos temporarios son situaciones permanentes e intolerables, en parte porque dichas situaciones representan un patrón en su vida. Los niños con autoestima baja no esperan mucho de los demás, como por ejemplo, no esperan que nadie los invite a jugar y pueden ocupar su tiempo libre en solitario. Predomina un sentimiento de pesimismo.

El vídeo de esta semana tratará sobre diferentes pautas y estrategias para ayudar a los papas a identificar situaciones difíciles y a instaurar diversas pautas que aumenten la autoestima del niño.

Laura Montero Blanco

Licenciada en psicología clínica y de la salud M-26668