Es cada vez más frecuente en nuestro entorno oír expresiones como “Estoy estresado”, “vivo estresado continuamente”.
![](https://psicologosretiro.com/wp-content/uploads/2019/12/fashion-person-woman-hand-1024x683.jpg)
De hecho se puede decir que es uno de los problemas más comunes de la sociedad. De un modo más general, la respuesta del estrés es una reacción inmediata e intensa, que implica la movilización general de los recursos del organismo, y que se produce ante situaciones que suponen importantes demandas para el individuo, ya sea porque implican una pérdida (ruptura sentimental, muerte de un ser querido), o bien por tratarse de una amenazada ( enfrentarnos a un atracador, el despido por parte del jefe, etc.) o de un reto ( competiciones deportivas o aprobar una oposición, etc.).
Esta reacción general incluye respuestas fisiológicas (el corazón se acelera, aparece sudor en las manos, los músculos se tensan…) cognitivas (mayor rapidez de pensamiento, pensamientos automáticos) y motores (huir del peligro, evitar la situación…) En definitiva, la respuesta del estrés prepara al organismo para actuar ante amenazadas y retos de diversa índole que aparecen en el entorno de cada uno, como estímulos estresantes.
La respuesta del estrés es una reacción adaptiva que ha permitido al individuo poder adaptarse a las diferentes situaciones del entorno, la problemática llega cuando deja de ser adaptativa convirtiéndose en algo desadapatativo aparece con una mayor frecuencia, intensidad e interfiere en el día a día de la persona generando dificultades como disminución en el rendimiento académico y laboral, malestar físico y emocional, etc.)
Este tipo de problemas surgen en diferentes circunstancias:
- La persona se expone a situaciones amenazantes o a situaciones intensas y duraderas. Este hecho dependerá de las estrategias que tenga el individuo para hacerle frente a las situaciones condicionando que permanezca en el tiempo.
- La persona hace interpretaciones errores a cerca
de las situaciones a las que se enfrenta:
- Identifica como amenazantes situaciones que no lo son
- Identifica un grado de amenazada desproporcionado en diferentes situaciones
- Tarda en identificar una situación como estresante
- Considera que no posee estrategias para hacerle frente.
- La persona se activa fisiológicamente, lo cual en muchas situaciones de las que nos exponemos o enfrentamos en el día a día no es necesario un nivel de activación tan grande.
- La persona emite respuestas inadecuadas a la
situación:
- Bien porque no posee un repertorio d estrategias adecuado
- O bien, porque no pone en marcha las estrategias como se debería.
Con todo ello, el estrés puede conllevar a una serie de patologías que pueden adoptar diversa forma:
- Afecta a problemas físicos (tratornos gástricos, asma, dolor..)
- Afectar a otros problemas psicopatológicos, contribuyendo a su aparición e influyendo en su evolución, se relaciona con: consumo de drogas, trastornos de ansiedad, depresión, problemas de relación social, etc.
- Pueden propiciar la aparición de otro tipo de trastornos cuando hemos estado sometidos a situaciones estresantes graves o a una mala adaptación del estímulo estresante (estrés agudo grave…)
- Pueden aparecer otro tipo de síndromes asociados a la sociedad moderna, como el “superwoman” que trabajan dentro y fuera de casa, el de adaptación postvacacional, o el burnout (relacionado en entornos laborales especialmente en aquellos que implican un servicio a los demás). A diferencia de otros trastornos caracterizados por una sintomatología y curso, estos se caracterizan por su contextualidad, siendo definitoria para su evolución con unas características determinadas en cada uno de los casos.
En muchas ocasiones puede deberte a factores ambientales o psicosociales, deteriorando y generando un gran malestar en el individuo. Actualmente según recoge la APA entre un 75% y 90% de las visitas que se hacen en medicina general pueden atribuirse a quejas y dolencias relacionadas con el estrés.