Hace unos días se declaró el 15 de julio como día internacional del Zentangle, pero ¿Qué es esto?
Zentangle es una técnica de meditación a través del dibujo de patrones. Esta palabra proviene de
“Zen” escuela budista que pretende alcanzar la iluminación a través de la meditación, y “Tangle”, que
inglés significa “enredo”. Probablemente muchxs en este punto piensen “esto no es para mí porque
yo no se dibujar”, tranquilxs, es un proceso por el que se pasa cuando se empieza a conocer esta
maravillosa manera de meditar, y es que, para practicar Zentangle, no hace falta tener maestría en el
dibujo, ni en ningún tipo de artes plásticas. Da igual si has dibujado alguna vez en la vida o no, no se
trata de eso.
La primera y única regla de Zentangle es “No hay reglas”, y esto, supone una ventaja, ya que, no
implica conocimientos previos. Sin embargo, también implica algo que va mucho más allá del arte:
nos expone a la incertidumbre, eso que a las personas nos hace sentir tan incómodas. Zentangle no
busca la perfección en los trazos, de hecho, se dibuja a mano alzada, directamente con el rotulador,
nada de borrador (la mayoría de las veces en la vida, no podemos borrar “los errores” que
cometemos). Esto supone parar un momento a encontrar soluciones alternativas en caso de que
nuestro dibujo no nos guste, lo que se traduce en ejercitar la flexibilidad cognitiva (capacidad para no
quedarnos atascadxs en una sola opción).
Pero, ¿Dónde está la meditación en todo esto? Desde el comienzo de la práctica, se trabaja en poner
el foco de atención en la respiración natural, sin forzarla. La respiración nos ancla al presente y nos
conecta con nuestro cuerpo y emociones, regulando todo aquello que sentimos , de ahí su
importancia. Durante una sesión de Zentangle, el foco se mantiene en la respiración mientras se
dibuja. No se trata de terminar rápido, sino de conectarse con lo que la experiencia está haciéndome
sentir, por eso el resultado no es el fin, por eso no hace falta saber dibujar. El objetivo es simplemente
la experiencia de estar en el aquí y el ahora, conectando con las emociones, mientras se dibuja. Las
sesiones, por tanto, son un espacio de reflexión y toma de conciencia, aportan información
experiencial muy valiosa para trabajar posteriormente en terapia. De hecho, los estudios demuestran
que ayuda a reducir síntomas depresivos y de ansiedad.
Por todo esto, Zentangle facilita un espacio de calma y regulación emocional al mismo tiempo que
permite la exposición a sensaciones desagradables (incertidumbre, frustración) y la reflexión a través
de las mismas. A menudo resulta complicado poner palabras a las experiencias, así que ¡Nada mejor
que ponerse manos a la obra y descubrir los beneficios de Zentangle!