¿UNA NUEVA FORMA DE RELACIONARNOS?

administradorAdultos, Infantojuvenil, Parejas

¿Cuántas horas pasamos al día interactuando con algún aparato tecnológico? ¿Y cuantas de esas horas las utilizamos para socializar o relacionarnos?

Resulta difícil dar una respuesta exacta, pero es evidente que el número ha ido creciendo exponencialmente en los últimos años y esto ha traído cambios en nuestros hábitos y forma de relacionarnos. En la actualidad predomina un modelo de sociedad sumergido en las nuevas tecnologías, estas habitan en nuestro día a día y resulta interesante tratar de analizar y comprender qué influencia tiene en las relaciones interpersonales.

Internet, las redes sociales y el fácil acceso a dispositivos móviles y tecnológicos nos llevan a un mundo cada vez más conectado pero ¿a nivel social seguimos estando tan conectados?

El uso de internet y videojuegos desde la infancia hace que las nuevas generaciones disfruten y dominen la tecnología llegando a tener grandes conocimientos tecnológicos y normalizando su uso desde que tienen conciencia prácticamente; y esto tiene consecuencias tanto positivas como negativas. Positivas porque la tecnología puede suponer avances en muchos sentidos, entre otros permite un mejor acceso a la información, proporciona facilidades a nivel educativo, nos acerca a seres queridos cuando estamos lejos físicamente, etc. Sin embargo, también tiene consecuencias negativas, en primer lugar por los posibles riesgos derivados de tener tanta información tan accesible en ocasiones sin supervisión pero también porque ha conllevado cambios en niños y adolescentes a la hora de establecer relaciones con iguales y esto podría derivar en algunos problemas.

Muchas madres y padres manifiestan cierta preocupación por los patrones actuales de relación que mantienen sus hijos, principalmente a través del uso de la tecnología. Si tienes un hijo o hija en edad adolescente, es posible que te plantees cómo es su manera actual de relacionarse hoy en día con iguales y que al compararla con modelos anteriores pensemos que no tiene nada que ver.

Es cierto que en algunos casos la tecnología podría afectar de manera negativa a niños y jóvenes porque el hecho de pasar muchas horas delante de una pantalla puede generar cierto aislamiento del mundo real. Pasar muchas horas jugando o navegando en internet puede implicar que se reste tiempo a otras actividades o situaciones que también son importantes y nos ayudan a generan patrones básicos en nuestras relaciones. No obstante, que un niño o adolescente pase muchas horas con el móvil u ordenador no implica necesariamente que no se esté relacionando, sino que es real que ha cambiado la forma de relacionarse y hoy en día muchos adolescentes sobre todo mantienen conversaciones, conocen gente o incluso quedan para jugar a través de las pantallas, y es su manera de “estar juntos”.

La pregunta habitual de madres y padres es si esto representa un problema para sus hijos y, aunque habría que analizar cada caso individualmente, no podemos olvidar que vivimos en mundo en constante evolución y que es lógico que cambien nuestros hábitos y patrones básicos de socialización cuando las posibilidades aumentan. No obstante, sí podemos estar atentos a algunas señales de alerta que podrían avisarnos de un posible problema:

  • Si un niño o adolescente solo tiene amigos virtuales y no tiene ninguna actividad presencial con ninguno de ellos ni los conoce en persona. Esto es peligroso porque podría derivar en problemas futuros para conectar con el mundo real. 
  • Si presenta dificultades para interactuar en situaciones sociales con compañeros de clase o amigos y prefiere relacionarse exclusivamente a través de las redes.
  • Si descuida o dejar de hacer otras actividades que antes le gustaban, especialmente si son actividades físicas o sociales, y prioriza solo las redes.
  • Por último, un caso grave sería si hablamos ya de adicción a internet, que se caracteriza porque la persona se vuelve completamente dependiente de la conexión y que incluso puede presentar síntomas de ansiedad o violencia si no pudiera acceder a ella.

Después de este último año lleno de dificultades todos hemos sido conscientes de las ventajas y desventajas que puede proporcionar la tecnología. Por un lado, hemos visto los beneficios porque nos ha permitido mantenernos cerca y en contacto de seres queridos, así como distraernos y mantener formas de ocio, en una época especialmente difícil a nivel social y con mucha necesidad de distracción y estimulación. Sin embargo, también hemos visto que la tecnología no es suficiente, todos estábamos deseando reencontrarnos con familia y seres queridos, poder disfrutar del contacto y disfrute de tiempo compartido en persona. Esta sería la idea a trasmitir a niños y adolescentes, a lo largo de la historia ha habido y va a haber muchos cambios en la manera de socializar, pero hay ciertas necesidades sociales que la tecnología, por más que avance, no puede cubrir. Y la idea es que ambas cohabiten y estén presentes, pero que una no quite el tiempo necesario a la otra, porque entonces habrá carencias y posibles dificultades.

En conclusión, un uso adecuado de la tecnología puede tener muchos efectos beneficiosos tanto a nivel educativo como de comunicación ya que nos conecta y nos acerca a nuestros seres queridos de una manera fácil y rápida; pero hay que vigilar que no sea el único medio que utilizamos para socializar porque ello podría ocasionar asilamiento, problemas de comunicación y dificultades a la hora de enfrentar situaciones sociales en el día a día.

Para finalizar, si te has sentido identificado con este post o crees haber reconocido a alguien en él y no sabes cómo ayudarte o ayudarle, os invitamos a que os pongáis en contacto con nosotras y desde Psicólogos Retiro estaremos encantada de ayudaros.

Laura Goñi Pérez

Nº colegiada: M-27776

Psicóloga clínica en Psicólogos Retiro